y llueve más cada día allí afuera...
Ojala no nos perdamos estas lluvias,
y dejemos de estar en medio de ellas.
Ojala llegues a mí antes de que se me asuste toda la cordura...
----------------------La perdida-----------------------------------
La loca, la perdida le llamaban mientras caminaba con pasos lentos,
la gente la miraba pasar y como una leprosa apartabanse de ella,
desprendía un olor característico a la ropa guardada por años,
esa que por vieja nadie usa, olía a recuerdos, olía a dolor.
Era para muchas conocida como la ofrecida, ya que la acusaban de mucho mirar a sus maridos...
Camina por allí sin rumbos fijos, pareciese que se pregunta algo.
Sus ropas largas y grises, le dan un aspecto triste,
y su rostro que dejaba ver una belleza maltratada por el tiempo, se veía golpeado por arrugas.
La loca, la perdida solo se preguntaba donde habría dejado el corazón,
en que parte de la tierra un desconocido se lo había llevado,
y eso sabía, solo eso le constaba, que el dolor que traía en el pecho,
era por algo que allí faltaba...
No sabía de amores verdaderos, ni de lechos tibios o besos al alba,
no sabía de caricias dulces en su rostro,
ella solo recordaba dolor, y ese intenso sentimientos de pérdida que no se hiba...
La loca, era solo una sobra en las calles, a nadie le importaba si faltaba un día o un mes en aparecer, era una cosa más sin gracia que pasa en las calles, pero al verla, se ofendían....
y sin más, sin saber la juzgaban.
La perdida, era una loca, era una rabiosa, era una ofrecida,
era solo una mujer sin vida...
la gente la miraba pasar y como una leprosa apartabanse de ella,
desprendía un olor característico a la ropa guardada por años,
esa que por vieja nadie usa, olía a recuerdos, olía a dolor.
Era para muchas conocida como la ofrecida, ya que la acusaban de mucho mirar a sus maridos...
Camina por allí sin rumbos fijos, pareciese que se pregunta algo.
Sus ropas largas y grises, le dan un aspecto triste,
y su rostro que dejaba ver una belleza maltratada por el tiempo, se veía golpeado por arrugas.
La loca, la perdida solo se preguntaba donde habría dejado el corazón,
en que parte de la tierra un desconocido se lo había llevado,
y eso sabía, solo eso le constaba, que el dolor que traía en el pecho,
era por algo que allí faltaba...
No sabía de amores verdaderos, ni de lechos tibios o besos al alba,
no sabía de caricias dulces en su rostro,
ella solo recordaba dolor, y ese intenso sentimientos de pérdida que no se hiba...
La loca, era solo una sobra en las calles, a nadie le importaba si faltaba un día o un mes en aparecer, era una cosa más sin gracia que pasa en las calles, pero al verla, se ofendían....
y sin más, sin saber la juzgaban.
La perdida, era una loca, era una rabiosa, era una ofrecida,
era solo una mujer sin vida...
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